Historia del Hostal Esteba

En Caldes de Malavella

Nuestra historia comienza en 1944 cuando justo después de casarse, el Avi Pere y la Yaya Loreto abren una pequeña taberna en el centro del pueblo de Caldes de Malavella.

Un lugar de encuentro para la gente de Caldes y visitantes. Se dice que en aquella taberna se servía uno de los mejores pistos y callos de la comarca.

El espíritu emprendedor de la yaya Loreto hizo que en 1957 dejaran la taberna para abrir una pequeña Fonda situada justo en frente de las Termas Romanas. Poco a poco, gracias al saber hacer de los avis y a su hija Mercedes, se hicieron con un nombre en Caldes de Malavella. Enseguida, el hostal se llenó de veraneantes de Barcelona y con el boom del turismo de los años 60 eran frecuentes las estancias de clientes provenientes de Francia y Holanda.

Caldes de Malavella es famosa por sus aguas termales

Un hostal con más de 50 años de tradición

En esa pequeña Fonda estuvimos hasta diciembre de 1977. En ese periodo de tiempo, Mercedes se casó con Quim y nacieron sus dos hijos Carles y Pere.

El 23 de diciembre de 1977, se inauguró el establecimiento donde estamos actualmente. Aquella fue una apuesta arriesgada por las dimensiones del proyecto. La yaya Loreto y el Avi Pere, esta vez con la ayuda de sus hijos, construyeron el nuevo Hostal Esteba.

Un pequeño hostal con restaurante y bar, situado en la entrada del pueblo justo delante de la zona deportiva. Aquel, sin duda, sería el proyecto de vida definitivo para las generaciones que les seguirían.

hostalesteba caldes de malavella establecimiento f

Actualmente y desde el año 2008, Carles, hijo de Quim y Mercedes es quien se encarga de continuar el proyecto iniciado en 1944